Nos levantábamos a las 8:00 con una música relajante y con los buenos días de una radio que proclamaba consignas políticas constantemente; parecía una emisora pro etarra; sin embargo, los encargados de preparar el desayuno, debían hacerlo 15 minutos antes.
A las 9:00, tras desayunar, nos separaban según la casa asignada y trabajábamos en tareas comunitarias tales como la recogida de leña, la albañilería o la recogida de excremento de oveja para ser usado como abono.
A media mañana, efectuábamos un descanso para tomar un tentempié y poder recobrar fuerzas. En ese momento, aprovechábamos para compartir experiencias y anécdotas con los compañeros y compañeras. Algunos intentaron aprovechar el relax del momento para lanzar los tejos a quién le gustaba; de hecho, podemos afirmar que hubo algún conato de romance... y no podemos contar más.
Luego, hacíamos diferentes talleres como uno de antropología, otro sobre la naturaleza y una asamblea el ultimo día para valorar nuestra estancia en Búbal.
Más tarde, a las 14:00, almorzábamos, aunque las personas encargadas del comedor tenían que estar a las 13:45. Cunado terminábamos teníamos dos horas de descanso en las que recorríamos el pueblo, íbamos a la iglesia a hablar, jugábamos al futbolín o simplemente nos sentábamos en la plaza a hablar.
A las 16:00 comenzábamos con varias actividades en grupo como una gincana, diferentes juegos que realizaban los antiguos habitantes de pueblo y un juicio a una supuesta bruja.
A las 18:00 merendábamos, algunos en la iglesia y otros en plaza del pueblo hasta las 18:30 más o menos que comenzábamos con el proyecto de centro que acababa a las 20:00 excepto los encargados del comedor que tenían que estar en dicho lugar a las 20:30. Esto el viernes varió un poco ya que tuvimos el proyecto de centro antes de la merienda donde hablamos a los de Nájera de Tenerife. Luego de la merienda tuvimos una despedida en la nos reunimos en la iglesia para estar todos juntos y firmarnos unas dorsales.
A las 20:45 era la cena y luego de esta a las 22:00 teníamos actividades de animación donde realizábamos diferentes juegos todos juntos hasta las 23:00, que finalizaba.
A las 24:00 todos nos dormíamos para el día siguiente poder tener energía para hacer lo que nos tenían preparados los monitores.
Sheila Galván, Samuel Hernández, Misael Regalado y Valentina Celis.